El gobierno de Santa Fe ha emitido fuertes críticas contra el carácter transitorio de la reciente decisión del gobierno nacional de eliminar temporalmente los derechos de exportación para granos y subproductos. Uno de los funcionarios del sector productivo calificó la medida como “el hot sale kirchnerista para el campo”.
Aunque el Ejecutivo santafesino celebró la baja, funcionarios provinciales de alto rango cuestionaron la falta de previsibilidad y la estabilidad de las reglas de juego para el sector agropecuario.
El gobernador Maximiliano Pullaro, quien destacó que la provincia venía reclamando la medida “desde el primer día de gestión”, reclamó de manera enfática que la eliminación de retenciones debe ser definitiva. El mandatario advirtió que la política no debe ser utilizada como una herramienta coyuntural, expresando que “queremos que las retenciones se eliminen para siempre, no de manera transitoria, ni para sostener el tipo de cambio con fines electorales, ni para financiar fuga de capitales”.
Pullaro insistió en que las políticas deben beneficiar a los productores, generar previsibilidad para la inversión y hacerse “por convicción y no por necesidad”.
En sintonía, la vicegobernadora Gisela Scaglia sostuvo que si bien “la baja de retenciones siempre es una buena noticia”, advirtió que “no alcanza con medidas transitorias ni electoralistas”. Scaglia lamentó la falta de previsibilidad, señalando que al sector le “duele la falta de previsibilidad, como si sembrar y cosechar se resolviera en 30 días”.
Remarcó que el país requiere una política de largo plazo que elimine las retenciones de forma definitiva, permitiendo a los productores invertir con confianza y construir futuro.
Duras críticas: “El hot sale kirchnerista”
Las críticas más contundentes vinieron del ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, quien calificó la medida como “el hot sale kirchnerista para el campo”.
Puccini cuestionó que la decisión obedezca a una “necesidad desesperada por conseguir dólares” y no a un plan estructural genuino. Según el ministro, este anuncio ratifica que la eliminación de retenciones no está motivada por darle competitividad a los sectores productivos, sino que “los motiva puramente una necesidad de caja”. El funcionario afirmó: “Estamos viendo la vuelta del Dólar Soja de Massa”.
Ignacio Mántaras, secretario de Agricultura y Ganadería, coincidió con este diagnóstico, lamentando que el sector deba enfrentar nuevos “manoseos” que impactan negativamente en su previsibilidad. Mántaras también utilizó la denominación de “hot sale del kirchnerismo” y señaló que los productores agropecuarios, que invierten sin beneficios impositivos, aduaneros ni cambiarios (comparables a los otorgados en el RIGI), “no se merecen este manoseo”.
A pesar del cuestionamiento a la temporalidad, las autoridades provinciales coincidieron en que la eliminación de retenciones representa un paso en la dirección correcta. Sin embargo, insistieron en la necesidad de que sea una medida definitiva, acompañada de un marco de estabilidad macroeconómica para asegurar la inversión y la competitividad del agro a largo plazo.
